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Los VIEJOS SURCOS MENTALES nos impiden CRECER (f:google)
Hola amigos, hoy retomamos Vidas de Éxito.
Voy a hablaros de Iván, un hombre que vino a mi tras sentirse hundido por segunda vez por un fracaso matrimonial.
Sus principales sentimientos eran de invalidez como hombre, de vacío, de tristeza profunda y de abandono.
Había puesto todas sus esperanzas, sus ilusiones, sus sentimientos y su amor en una mujer que no supo entenderle y que no pudo conectar a nivel profundo con él.
Se repetía su historia primera de abandono con las mujeres.
Su vida familiar no había sido buena ni equilibrada.
Su primera figura femenina, su madre; nunca le había apoyado en sus proyectos y, su adolescencia (etapa clave en el crecimiento de una persona), fue una tortura constante por los múltiples enfrentamientos con las dos mujeres principales de su familia: su madre y su hermana.
Su padre falleció siendo él muy pequeño y, toda la responsabilidad del bienestar de la casa recayó injustamente sobre él.
Cuando se casó con María (su primera compañera), sintió que por fin podía sentirse querido por una mujer. Tras cinco años de convivencia, ésta le dijo que no le quería como se “debe” querer a un marido, y se fue.
Pasaron siete años hasta que de nuevo, volvió a enamorarse. Siete años de tortura emocional y de tristeza. Cada noche lloraba en silencio y percibía una profunda soledad que intentaba alejar con su trabajo, que antes adoraba.
Cuando decidió vivir con su segunda mujer, desafió las leyes de los VIEJOS SURCOS MENTALES, que nos dicen desde el interior, que todo irá de nuevo mal y que nos encontraremos otra vez con el mismo problema.
Vivió año y medio feliz, pero tras este corto tiempo, Julia, su segunda compañera, empezó a confrontarle en todo. Las discusiones eran constantes y, ella no aceptaba la forma de ser más introspectiva de Iván.
Al año, nuestro protagonista de nuevo se quedaba solo. Fue cuando nos conocimos.
Amigos, si tengo algo claro en la vida, es que los problemas se repiten muchas veces para que Aprendamos Nuevas Formas de Resolverlos y Nuevas Formas de Enfrentarnos a ellos.
Esto requiere de un ENTRENAMIENTO basado en la toma de Conciencia de nuestros VIEJOS SURCOS MENTALES.
Y para que este Aprendizaje se lleve a cabo, hemos de ENTENDER desde una parte de la Mente que se encuentra alejada de lo puramente “racional” y lógico.
Es la MENTE SUBCONSCIENTE o el HEMISFERIO DERECHO, donde se encuentran grabados los VIEJOS CÓDIGOS DE INCAPACIDAD o de pobreza.
Iván tenía dos caminos esencialmente:
1.) Desconfiar de la Vida y de sí mismo, quejarse o hacerse la víctima, renegar de la existencia humana, lamentarse, deprimirse, desmotivarse, elegir la desconfianza como compañera vital, darle poder al miedo, esconderse emocionalmente o cerrarse ante los demás, sentirse un perdedor, un derrotado…
2.) Vivir la experiencia parecida de otra manera, abriendo NUEVOS SURCOS MENTALES basados en la ELECCIÓN de VIVIR PLENAMENTE y aprender a quererse a sí mismo.
Y esto es lo que hizo.
Al repetirse el problema optó por Aprender del mismo. Se preguntó qué tenía que ver con estas dos situaciones sin culparse.
Por ello, abrió su Mente y tomó su PODER.
Aunque creamos que no tenemos nada que ver con el problema, el hecho de plantearnos un NUEVO ENFOQUE del mismo, nos ABRE NUEVOS SURCOS DE ENTENDIMIENTO.
Siempre tenemos que ver con el problema. Y la clave es nuestro pasado, nuestras Creencias de falta de merecimiento y los VIEJOS SURCOS MENTALES que generamos ante las dificultades propias del vivir.
Es sumamente importante la FORMA en que REACCIONAMOS ante la misma situación dolorosa.
Iván aprendió a liberarse de la rabia inconsciente que sentía ante las mujeres por el daño recibido.
También aprendió a quererse y, sobre todo APRENDIÓ que las segundas, terceras, o decimoquintas ocasiones de vivir algo semejante, SIRVEN (SI NOS ABRIMOS) para generar un NUEVO ENTENDIMIENTO y dejar por fin atrás, las VIEJAS LIMITACIONES y los obstáculos que nosotros mismos atraemos de forma inconsciente debido a nuestras carencias afectivas.
En resumen, Iván comprendió, no sólo desde la Mente Racional, sino desde el Corazón o HEMISFERIO DERECHO, lo siguiente:
– Que no era un fracasado.
– Que no era bueno asociar la pérdida de pareja a ninguna minusvalía suya.
– Que deseaba Aprender a AMARSE A SÍ MISMO.
– Que deseaba Aprender una NUEVA FORMA de relacionarse con las mujeres basada en la Autoestima.
– Que EXISTÍAN NUEVAS POSIBILIDADES DE ÉXITO para él.
– Y que mientras encontraba aquello que buscaba, SE TENÍA A SÍ MISMO, siendo su mejor compañero y amigo.
Os recuerdo amigos, que lo que “cura” es el VÍNCULO con otra persona que haya experimentado el AMOR A SÍ MISMA, haciéndonos COMPRENDER desde un lugar muy hondo (MENTE SUBCONSCIENTE) que somos dignos de ser AMADOS.
Los libros y las técnicas son importantes, pero el ENTENDIMIENTO para GENERAR NUEVOS SURCOS DE ÉXITO, vendrán de ÓPTIMAS RELACIONES, basadas en el RESPETO y en la AUTENTICIDAD.
Hemos de comprender que la TENDENCIA principal de la MENTE SUBCONSCIENTE es codificar las EXPERIENCIAS DOLOROSAS Y LOS FRACASOS como nuestra PRINCIPAL ESTRUCTURA de personalidad.
Esto LIMITA nuestra VIDA de forma constante, continua e inconsciente en la mayoría de las ocasiones.
Son lo que llamo VIEJOS SURCOS MENTALES, que provienen de la repetición de las mismas formas de reaccionar, de actuar y de pensar, ante los problemas que se nos presentan.
Se requiere VALENTÍA, CONFIANZA y ENERGÍA O FUERZA VITAL para salir de esta repetición y CREAR NUEVOS SURCOS DE ÉXITO.
Ellos nos conducen a la verdadera LIBERTAD para ser quién realmente SOMOS, seres llenos de pasión y de merecimiento para vivir una vida plena.
Iván se atrevió a vivir y experimentar su relación con la Vida y con las mujeres, de otra manera.
¿Lo hacemos también nosotros, amigos? Siempre merece la pena.
Os dejo mi Pensamiento y mi CREENCIA principal, amigos:
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“Comprobamos realmente nuestro Éxito cuando, ante una misma circunstancia, nos expandimos en lugar de encogernos”
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Gracias y besos a todos por vuestra conexión y apoyo.
JUNTOS NOS ABRIMOS A LO NUEVO Y CREAMOS UN NUEVO MUNDO BASADO EN LA CONFIANZA, EN EL RESPETO Y EN LA ABUNDACIA DE BIENESTAR.
Mayte Pascual
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